Por primera vez en 55 años, Triumph Motorcycles exhibirá fuera de la fábrica su modelo clásico más icónico, la Bonneville conducida por Steve McQueen en la película El Gran Escape.
La unidad de 650 cc, que fue restaurada y expuesta en el Triumph Factory Visitor Experience, saldrá por primera vez de la casa matriz en Hinckley para presentarse en el Concurso de Elegancia del exclusivo Salon Privé Classic Cars Show.
La muestra de vehículos de lujo, que reúne a lo más selecto del mundo motor británico en el palacio de Blenheim, Oxfordshire, tendrá a la también denominada TR6R Trophy concursando por el cetro del mejor modelo en la categoría reservada para máquinas fabricadas entre 1940 y 1979.
La citada Bonneville de 1962 protagonizó una de las persecuciones más recordadas en la historia del cine, luego de que el personaje de McQueen, el oficial estadounidense Virgil Hilts, la usara para evadirse de un campo de concentración nazi ubicado en Polonia.
En la actual gama, existe un kit “Escape” para la Bonneville T120, compuesto por alforjas de cuero, parabrisas alto, defensas de motor cromadas, butaca “King & Queen” y respaldo en el puesto del acompañante, entre otros opcionales.
La relación de Triumph con el cine es larga y se remonta a mediados del siglo XX, cuando Marlon Brando inmortalizó una Thunderbird en El salvaje y James Dean hizo lo propio al mando de una TR5 Trophy en Rebelde sin causa.
Posteriormente, las unidades de la marca británica aparecieron en cintas como Matrix, Misión: Imposible 2, Jurassic World, El paciente inglés, El curioso caso de Benjamin Button, Tres metros sobre el cielo, Agente Salt. Wallace y Gromit, Sin escape y Daredevil.
En el transcurso de 2018, los modelos de Triumph han acompañado algunas de las realizaciones más destacadas, tales como Tomb Raider, Rampage, Ant-Man y la Avispa, Johnny English 3 y Misión: Imposible – Repercusión.